Like most people of my age, I just existed


Kick Ass









sábado, 26 de marzo de 2011

Noah (apellido) Stroup

Miro el vacio oscuro y sintió un profundo deseo por lanzarse, terminar con su vida. Se cumplian 6 años de sus muertes pero aquello le seguía cociendo por dentro como el primer día.
Noah contemplo la destrucción en medio de la que vivía y recordo sus buenos años. Era verdad que no vivía en condiciones extremas de miseria pero la diferencia con su vida pasada era abismal. En el fondo sabía que debía agradecer tener donde recurrir todas las noches, la guerra le había arrebatado a todos.
La guerra...
Esas 8 sílabas, tan simples, diminutas habían ocasionado la destrucción de más de un 3/4 de la Tierra; pero es mínimo que se espera cuando es una guerra entre demonios y ángeles. Una guerra por definir de una vez por todas quienes eran los lideres supremos, ¿y donde quedaban los humanos? ¿donde quedaban los hibridos como él? En el caso de los primeros luchaban, o daban esa apariencia. No eran más que un estorbo para esos seres superiores, unas hormigas molestas pero las cuales no se pueden acabar todas.
Noah sabía que no era más que una pantalla, esa lucha por que los humanos prevalecieran no era un modo más de evitar elegir y cometer el error de elegir al vencido.
¿Y los híbridos?
Elegían quienes le convinieran, con quienes su sangre les acercara más. ¿pero que podía hacer él, que tenía tanto sangre de humano, como de demonio y angel?

Sacó un cigarillo del bolsillo de su pantalón y se lo llevó a la boca, acercó algo de fuego del encendedor pero se detuvo... ¿qué hacer? Dejó que su cabello oscuro cayera cubriera su rostro por completo. Sintió ganas de llorar pero no podía, la última lagrima que había derramado fue dolorosa que lo había secado por completo.

La puerta de la habitación se abrió suavemente pero la luz amarilla del pasillo fue suficiente para que Noah apartara la miradad brutalmente.
- deberias estar dormido - comentó un hombre alto, de cabello castaño.
- no tengo sueño
El hombre asintió con suavidad y cerró la puerta. Llegó a tientas hacia la pequeña lampara sobre la mesa de noche y la encendió. Esta vez, Noah si tuvo la delicadeza de mirarlo. Sentado sobre la cama, con la cabeza algo hundida tenía cierto aire de vulnerabilidad. Se fijó en la cicatriz que cruzaba su pómulo.
- ¿piensas en ellos? - preguntó de la nada
El chico se sintió lastimado ante la pregunta y regresó la vista al barrio oscuro y desastroso afuera de la ventana.
- dime, ¿no he cuidado bien de ti estos años? Se que no soy ellos, que nunca podre igualarlos pero - apretó sus puños con fuerza - lo menos que puedo hacer por tu madre es hacer, aunque sea, algo feliz... Deberías hablar con alguien, guardartelo para tí puede hacerte daño...
- !Estoy bien, Matt! - gritó a la ofensiva
El hombre sonrió de lado, acentuando la cicatriz del pómulo.
- Suenas igual a Liz, también decia que estaba bien. Nunca lo estaba.
- Ella era fuerte - masculló - Los dos lo eran

Matt sonrió y recordó los buenos tiempos, recordó al pequeño Noah jugando en el lodo, recordó a Madison, recordó cuando le dijo adiós, como se arrepintió y como cuando quiso buscarla... ya era demasiado tarde.

Una sacudida terrible los sacó a ambos de su estado de ensoñación. Miraron velozmente la ventana y fueron llamas de fuego cayendo del cielo.
- ¡Ataque! - gritó alguien, fue lo que bastó para que ambos buscaran el modo de salir del edificio y llegar al bunker.
Matt le extendió la mano a Noah, una vez que la tomó ambos salieron corriendo.
- ¡Esperen!
Apenas les alcanzo para ver como Skandar los seguía despavoridos. Los 3 salieron junto a una manada de humanos del edificios. Era un escenario apocalíptico pero ya estaban acostumbrados, en su mente no había más que llegar al bunker para estar a salvo. Eran 300 metros, nada, nada cuando no habían miles de criaturas sobrenaturales usando la Tierra como campo de batalla.
- ¡Ahí está! - gritó Skandar con tantas fuerzas que toda la manada siguió la dirección de su dedo sin preocuparse por si fuera verdad o no.
Una explosión aérea hizo que todos aumentaran la velocidad. Noah igual, se había topado con los típicos ojos morados de los ángeles, iguales al que había asesinado brutalmente a su madre. Eso lo llenó de pánico, aumento la velocidad pero cerró los ojos con fuerza, haciendo que tropezara con algo. Estaba apunto de levantarse y continuar cuando sintió un movimiento debajo de él. No había tropezado con un algo sino un alguien.

Era una chica de largo cabello café, quizás de su edad. Estaba sucia y cubierta de sangre. Se erguió apoyandose en su cuerpo y la chica se movió como reflejo a su peso.
- ¡Noah! - escuchó a Matt gritarle
Tomó a la chica con agilidad y la cargó sobre sus hombros. No procesaba el peso extra por la adrenalina en su cuerpo, tan solo sabía que debia llegar al lado de ese Matt que movía su mano incesamente hacia el interior de un bunker metálico subterraneo.
- ¡Noah! - gritó de nuevo Matt.
Apenas le alcanzó para girar y ver llamaradas de fuego correr hacía él. Dió zancadas sobrehumanas y se lanzó, junto a la chica, al interior.
La puerta se cerró, dejandolos en la oscuridad.

¿Que que es esto? No lo se, ayer mientras estaba en clases de frances con una alergía suprema comence a divagar y termine con esto. Simple curiosidad e interes. Noah es el hijo de Liz, eso es bastante obvio. Hablamos de un mundo apocalíptico en el que la verdadera guerra entre demonios y angeles ha empezado, y los humanos no tienen más que elegir algún bando.
Claro que lo que realmente quieren saber es: ¿El hijo de Liz con quien? SECRETO. Tuve cuidado de que no se diera ni una pista. Tan solo dije cabello oscuro, tanto Adam como Eidan tenian cabello oscuro solo que de diferentes tonalidades; no dije color de ojos, no mencione apellido y acerca de lo que Noah es, pues, ¿que Liz no es una humana con sangre de demonio y angel? O sea que por donde la busquen no saben!

¿Qué porque tenian que morir? No lo se! Algo que se me ocurrio... nada oficial solo algo para pasar el tiempo ya que estoy de vacaciones.
y nada... solo eso.
Escuchando Ordinary world!
Giselle d Ulliel

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